Graco Ramírez dejó en claro que no está trabajando para poner a Rodrigo Gayosso Cepeda como gobernador de Morelos; precisó que esta afirmación forma parte de las acciones de descalificación en contra de su hijo.

“No estoy trabajando para poner a mi hijo y colocar a mi hijo (como gobernador de Morelos); yo no soy un monarca, soy un demócrata”, precisó al tiempo de señalar que “no creo que lo sea, porque sería muy difícil para él y para mí que así fuera”.

Así respondió al gobernador Graco Ramírez al periodista Joaquín López Dóriga sobre las acusaciones que el alcalde de Cuernavaca, Cuauhtemoc Blanco Bravo, hizo en su contra sobre que “le quiere partir la madre” y que pretende que Rodrigo Gayosso sea el próximo gobernador.

Agregó que Cuauhtémoc Blanco está desesperado por ser candidato a gobernador de Morelos y están siendo utilizado por diversos actores políticos; recordó que fue candidato alcalde tras la firma de un contrato económico y sin conocer Cuernavaca ni reunir los requisitos que marca la ley.

Y apuntó que su formación y tolerancia políticas le impide lanzas amenazas como las señaladas por el ex futbolista.

Graco Ramírez reveló que tuvo una confrontación con su hijo Rodrigo Gayosso cuando éste buscó ser diputado local por el Partido de la Revolución Democrática.

“Rodrigo fue elegido presidente del PRD, después de que yo tuve una seria diferencia, y muy dura porque él tiene derechos políticos, para que no aceptara ser candidato a diputado; y después de eso lo eligen todos, todos son todos; el Consejo Estatal en pleno lo elige, diciéndome que yo no podía vetar esa decisión”, explicó.

Por otra parte, Graco Ramírez sostuvo el encuentro del obispo de Cuernavaca, Ramón Castro Castro, con dirigentes políticos y aspirantes a la gubernatura responde a la necesidad que tiene el jerarca católico de protección ante las acusaciones que pesan en su contra.

“Se junta el hambre con la necesidad”, dijo al tiempo sostener que Ramón Casto es un obispo muy militante, muy conservador, y ahora conspira porque fue puesto en evidencia por el interés económico que mostró en Tepalcingo por la administración de la Feria del Tercer Viernes de Cuaresma; la utilización de 75 millones de pesos para la rehabilitación de la Catedral de Cuernacaca; y la construcción de una lujosa cancha de tenis.

Asimismo, advirtió que el obispo está provocando un problema de gobernabilidad y seguridad en Jantetelco, que no va a permitir que explote.

Señaló que el obispo llama a todos para que lo ayuden y sean solidarios con él y ha tomado la bandera de la seguridad para confrontar al gobierno, cuando en el fondo está molesto con la aprobación de los matrimonios igualitarios.

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