Para comenzar hoy, dos de los candidatos a diputados federales de Morena hicieron gala de su capacidad de convocatoria, el día de ayer, en sus respectivas demarcaciones, a propósito del arranque de la campaña de Claudia Sheinbaum Pardo en el estado de Morelos.
Juan Ángel Flores Bustamante y Agustín Alonso Gutiérrez, por los distritos cuarto y quinto, respectivamente, con cabecera en Jojutla y Yautepec, mostraron a la candidata presidencial que son los indicados para acompañar el proyecto de ganar la mayor parte de los distritos federales.
En términos generales, fue un muy buen arranque en Morelos. Pero no todo fue miel sobre hojuelas, una vez más los reclamos por las imposiciones de candidaturas y el repudio a ciertos personajes vinculados con el gobernador, Cuauhtémoc Blanco Bravo, se hizo sentir entre los asistentes, al grado de que Sheinbaum tuvo que llamar, también nuevamente, visiblemente molesta, al respeto y la unidad. Respeto y unidad que precisamente es lo que no procuraron los abucheados y, en parte, por lo que volvieron a recibir su dosis de Karma.
Las y los postulados a los otros tres distritos federales, así como quienes van por los escaños del Senado de la República, tendrán una vara muy alta con la cual medirse, cuando llegue su momento de ser anfitriones en campaña para la coalición encabezada por Claudia.
Margarita González Saravia, guardando distancia y discreción, para no caer en algún supuesto de violación a las normas electorales, recibió el respaldo de Sheinbaum Pardo y no dejó de ser ovacionada por las huestes morenistas.
Por su parte, aunque ya no prioritarios para le elección de este año, candidatas y candidatos de Morena, a presidencias municipales y diputaciones locales, aunque ya no van en alianza al interior de Morelos, hicieron lo propio para hacerse notar, con el bajo perfil del caso, pues ellos todavía están impedidos para hacer campaña abierta, hasta el 15 de abril.
Para concluir hoy, toca hablar de Nueva Alianza. Fundado como un partido político nacional, que mantuvo su registro vigente del 2005 al 2018, año en el que la candidatura de Gabriel Cuadri los llevó a su peor derrota electoral y con ello a la pérdida del registro nacional, es un partido que emergió de las organizaciones y las bases magisteriales. Cargó con el peso de tener en su dirigencia moral a Elba Esther Gordillo, a quien finalmente ya se han sacudido.
Nueva Alianza pasó un largo periodo de aletargamiento, desde las pasadas elecciones presidenciales y hasta la más reciente renovación de su dirigencia estatal. El haberse vuelto a reconciliar y unir con el sindicato magisterial le da posibilidades de remontar el próximo 2 de junio.
Mario Luis Salgado, como presidente estatal y, Joel Sánchez Vélez, a la par, dirigente de la sección XIX y consejero especial del partido, han comenzado un proceso de reconstrucción que incluye su alianza electoral con Morena.
En poco tiempo, de haber comenzado con el tres por ciento de las preferencias electorales, en septiembre del año pasado, hoy ya superan el cinco por ciento y todo apunta a que siguen creciendo. Sin duda es uno de los pocos partidos locales, a los que hay que seguir la pista, pues sus objetivos electorales están basados en forma muy localizada y objetiva. En otras palabras, Nueva Alianza apuesta no por tirar escopetazos, a ver a qué le pegan, sino por lanzar tiros de precisión.
Y para iniciados:
En la comuna capitalina ya comenzó el análisis y la preocupación, por lo que pueda ocurrir en las próximas elecciones para renovar el Ayuntamiento. Los intentos por minimizar las posibilidades de Ale Flores, candidateada por Morena y ya registrada oficialmente el día de ayer, contrastan con los números y el río revuelto en la capital del estado. Lo único cierto, hoy por hoy, es que nadie se puede dar por seguro ganador. Quien crea eso, arrancará desde una pista equivocada.
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