Por Manuel García García // Director General de Mundo Magazzine
  1. No Hay Dinero, No Hay Dinero.
  2. No Les Pagan su Catorcena en SAPAC.
  3. Bloquean Calles y Ni Así, No Hay Dinero.

Poquitos minutos después de que los trabajadores del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC), medios de comunicación entrevistaron al alcalde, José Luis Uriostegui Salgado y acató a decir dos cosas que no son del agrado ni de los trabajadores ni de las familias de los mismos, porque en esta catorcena no habrá para comer y menos para salir a echarse unos tacos porque simplemente no hay dinero, no hay dinero y los trabajadores junto con sus familiares se tendrán que aguantar hasta que la directora del SAPAC, la maestra Evelia Flores Hernández, se ponga las pilas y haga un empréstito para que tanto trabajadores como sus familias tengan que llevar a sus hogares. La pregunta es sencilla, seguramente que el presidente municipal como su séquito de colaboradores cuentan con los miles de pesos y repletas aletas en el banco, por lo que no les preocupa si hay dinero o no en las arcas municipales y lo malo o bueno es que los usuarios del agua potable pagan puntualmente su agua y la pregunta, (otra vez) dónde está el dinero.

¿Seguirá siendo el SAPAC la caja chica de los PANístas?

José Luis, los regidores, la directora del sistema deben preocuparse por pagar a tiempo el sagrado sueldo de los trabajadores, porque para ellos es muy fácil decir que no hay dinero y menos salirse por la tangente al decir “en la administración pasada no les pagaban y no hacían paros”, hoy “por tan poco” ya paralizan el SAPAC. El alcalde ni la maestra Flores Hernández tienen idea de la economía de los trabajadores, además quien trabaja lo hace por necesidad y no por gusto, por lo tanto, el alcalde se debe preocupar, pero ya por el aguinaldo, porque a la mera hora va a salir con lo mismo de que no hay dinero, no hay dinero, no hay dinero, pero que tal la cena de Navidad en los hogares de los funcionarios y los jefes será de lujo con pavo y todo, bueno hasta con sidra y obras bebidas para degustar, junto con sus familias, la Gran Navidad que se avecina.

Recuerde, hay derecho de réplica.

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